CASA CHENCHO en SAMBOAL, el auténtico sabor de PUEBLO

Casa Chencho en Samboal, rinde homenaje a Crescencio de la Calle González, más conocido como Chencho que aunque nació en Ayna, localidad de Albacete, vivió, creció y disfruto de todo el esplendor que Samboal, ofrece.

Hijo de resineros y de ahí, su nacimiento en Ayna, ya que sus padres hacían temporada cuando él nació. Siguió la saga de la familia trabajando como resinero y fruto de su inquietud, se puso a estudiar música en la escuela de Coca. Localidad está a 8 kilómetros, que debía recorrer dos días por semana andando, para aprender a tocar el saxofón.  Instrumento este que dominaría y con el que se pudo ganar unos dinerillos y abandonar Samboal para trasladarse a Bilbao.

Allí, y tras muchas vicisitudes, mucho empeño, mucho trabajo, Chencho se establece y forma una familia de la mano de su mujer Romana Muñoz Albertos, “Romi”.

Trabajo como músico en orquestas y bodas, en los talleres del periódico El Correo y eso le permitía leer todos los días la actualidad del momento. Se hizo Agente de Seguros y con una Vespino que se compró, recorrió barrios y municipios de Bilbao, donde se hizo muy popular, por destacar su envergadura, más de 1,90 metros de altura, sobre el pequeño ciclomotor.

Entro en la Policía Municipal de Bilbao y permaneció en el consistorio bilbaíno hasta su jubilación.

No dejaba, puente, festividad o periodo estival sin acudir a Samboal, donde paseaba por sus tierras y pinares. No faltaba a su partida de tute, o a los bailes de las fiestas de la virgen.

Samboaleño entregado y un gran difusor de todos los encantos de este pequeño pueblo de Segovia, donde llevo a numerosas personas que sucumbieron a los encantos, de todo lo que ofrece Samboal.  Murió un 15 de diciembre de 2016, fruto de un fulminante cáncer, dejando un gran vacío, no solo en su familia y entorno, sino entre quienes le conocieron y convivieron con él.

De ahí este pequeño homenaje bautizando a esta casa de resineros, reconvertida en vivienda vacacional de dos plantas, con el nombre de Casa Chencho.

CASA CHENCHO en SAMBOAL, el auténtico sabor de PUEBLO

Casa Chencho en Samboal, rinde homenaje a Crescencio de la Calle González, más conocido como Chencho que aunque nació en Ayna, localidad de Albacete, vivió, creció y disfruto de todo el esplendor que Samboal, ofrece.

Hijo de resineros y de ahí, su nacimiento en Ayna, ya que sus padres hacían temporada cuando él nació. Siguió la saga de la familia trabajando como resinero y fruto de su inquietud, se puso a estudiar música en la escuela de Coca. Localidad está a 8 kilómetros, que debía recorrer dos días por semana andando, para aprender a tocar el saxofón.  Instrumento este que dominaría y con el que se pudo ganar unos dinerillos y abandonar Samboal para trasladarse a Bilbao.

Allí, y tras muchas vicisitudes, mucho empeño, mucho trabajo, Chencho se establece y forma una familia de la mano de su mujer Romana Muñoz Albertos, “Romi”.

Trabajo como músico en orquestas y bodas, en los talleres del periódico El Correo y eso le permitía leer todos los días la actualidad del momento. Se hizo Agente de Seguros y con una Vespino que se compró, recorrió barrios y municipios de Bilbao, donde se hizo muy popular, por destacar su envergadura, más de 1,90 metros de altura, sobre el pequeño ciclomotor.

Entro en la Policía Municipal de Bilbao y permaneció en el consistorio bilbaíno hasta su jubilación.

No dejaba, puente, festividad o periodo estival sin acudir a Samboal, donde paseaba por sus tierras y pinares. No faltaba a su partida de tute, o a los bailes de las fiestas de la virgen.

Samboaleño entregado y un gran difusor de todos los encantos de este pequeño pueblo de Segovia, donde llevo a numerosas personas que sucumbieron a los encantos, de todo lo que ofrece Samboal.  Murió un 15 de diciembre de 2016, fruto de un fulminante cáncer, dejando un gran vacío, no solo en su familia y entorno, sino entre quienes le conocieron y convivieron con él.

De ahí este pequeño homenaje bautizando a esta casa de resineros, reconvertida en vivienda vacacional de dos plantas, con el nombre de Casa Chencho.

CASA CHENCHO en SAMBOAL, el auténtico sabor de PUEBLO

Casa Chencho en Samboal, rinde homenaje a Crescencio de la Calle González, más conocido como Chencho que aunque nació en Ayna, localidad de Albacete, vivió, creció y disfruto de todo el esplendor que Samboal, ofrece.

Hijo de resineros y de ahí, su nacimiento en Ayna, ya que sus padres hacían temporada cuando él nació. Siguió la saga de la familia trabajando como resinero y fruto de su inquietud, se puso a estudiar música en la escuela de Coca. Localidad está a 8 kilómetros, que debía recorrer dos días por semana andando, para aprender a tocar el saxofón.  Instrumento este que dominaría y con el que se pudo ganar unos dinerillos y abandonar Samboal para trasladarse a Bilbao.

Allí, y tras muchas vicisitudes, mucho empeño, mucho trabajo, Chencho se establece y forma una familia de la mano de su mujer Romana Muñoz Albertos, “Romi”.

Trabajo como músico en orquestas y bodas, en los talleres del periódico El Correo y eso le permitía leer todos los días la actualidad del momento. Se hizo Agente de Seguros y con una Vespino que se compró, recorrió barrios y municipios de Bilbao, donde se hizo muy popular, por destacar su envergadura, más de 1,90 metros de altura, sobre el pequeño ciclomotor.

Entro en la Policía Municipal de Bilbao y permaneció en el consistorio bilbaíno hasta su jubilación.

No dejaba, puente, festividad o periodo estival sin acudir a Samboal, donde paseaba por sus tierras y pinares. No faltaba a su partida de tute, o a los bailes de las fiestas de la virgen.

Samboaleño entregado y un gran difusor de todos los encantos de este pequeño pueblo de Segovia, donde llevo a numerosas personas que sucumbieron a los encantos, de todo lo que ofrece Samboal.  Murió un 15 de diciembre de 2016, fruto de un fulminante cáncer, dejando un gran vacío, no solo en su familia y entorno, sino entre quienes le conocieron y convivieron con él.

De ahí este pequeño homenaje bautizando a esta casa de resineros, reconvertida en vivienda vacacional de dos plantas, con el nombre de Casa Chencho.

CASA CHENCHO en SAMBOAL, el auténtico sabor de PUEBLO

Casa Chencho en Samboal, rinde homenaje a Crescencio de la Calle González, más conocido como Chencho que aunque nació en Ayna, localidad de Albacete, vivió, creció y disfruto de todo el esplendor que Samboal, ofrece.

Hijo de resineros y de ahí, su nacimiento en Ayna, ya que sus padres hacían temporada cuando él nació. Siguió la saga de la familia trabajando como resinero y fruto de su inquietud, se puso a estudiar música en la escuela de Coca. Localidad está a 8 kilómetros, que debía recorrer dos días por semana andando, para aprender a tocar el saxofón.  Instrumento este que dominaría y con el que se pudo ganar unos dinerillos y abandonar Samboal para trasladarse a Bilbao.

Allí, y tras muchas vicisitudes, mucho empeño, mucho trabajo, Chencho se establece y forma una familia de la mano de su mujer Romana Muñoz Albertos, “Romi”.

Trabajo como músico en orquestas y bodas, en los talleres del periódico El Correo y eso le permitía leer todos los días la actualidad del momento. Se hizo Agente de Seguros y con una Vespino que se compró, recorrió barrios y municipios de Bilbao, donde se hizo muy popular, por destacar su envergadura, más de 1,90 metros de altura, sobre el pequeño ciclomotor.

Entro en la Policía Municipal de Bilbao y permaneció en el consistorio bilbaíno hasta su jubilación.

No dejaba, puente, festividad o periodo estival sin acudir a Samboal, donde paseaba por sus tierras y pinares. No faltaba a su partida de tute, o a los bailes de las fiestas de la virgen.

Samboaleño entregado y un gran difusor de todos los encantos de este pequeño pueblo de Segovia, donde llevo a numerosas personas que sucumbieron a los encantos, de todo lo que ofrece Samboal.  Murió un 15 de diciembre de 2016, fruto de un fulminante cáncer, dejando un gran vacío, no solo en su familia y entorno, sino entre quienes le conocieron y convivieron con él.

De ahí este pequeño homenaje bautizando a esta casa de resineros, reconvertida en vivienda vacacional de dos plantas, con el nombre de Casa Chencho.

CASA CHENCHO en SAMBOAL, el auténtico sabor de PUEBLO

Casa Chencho en Samboal, rinde homenaje a Crescencio de la Calle González, más conocido como Chencho que aunque nació en Ayna, localidad de Albacete, vivió, creció y disfruto de todo el esplendor que Samboal, ofrece.

Hijo de resineros y de ahí, su nacimiento en Ayna, ya que sus padres hacían temporada cuando él nació. Siguió la saga de la familia trabajando como resinero y fruto de su inquietud, se puso a estudiar música en la escuela de Coca. Localidad está a 8 kilómetros, que debía recorrer dos días por semana andando, para aprender a tocar el saxofón.  Instrumento este que dominaría y con el que se pudo ganar unos dinerillos y abandonar Samboal para trasladarse a Bilbao.

Allí, y tras muchas vicisitudes, mucho empeño, mucho trabajo, Chencho se establece y forma una familia de la mano de su mujer Romana Muñoz Albertos, “Romi”.

Trabajo como músico en orquestas y bodas, en los talleres del periódico El Correo y eso le permitía leer todos los días la actualidad del momento. Se hizo Agente de Seguros y con una Vespino que se compró, recorrió barrios y municipios de Bilbao, donde se hizo muy popular, por destacar su envergadura, más de 1,90 metros de altura, sobre el pequeño ciclomotor.

Entro en la Policía Municipal de Bilbao y permaneció en el consistorio bilbaíno hasta su jubilación.

No dejaba, puente, festividad o periodo estival sin acudir a Samboal, donde paseaba por sus tierras y pinares. No faltaba a su partida de tute, o a los bailes de las fiestas de la virgen.

Samboaleño entregado y un gran difusor de todos los encantos de este pequeño pueblo de Segovia, donde llevo a numerosas personas que sucumbieron a los encantos, de todo lo que ofrece Samboal.  Murió un 15 de diciembre de 2016, fruto de un fulminante cáncer, dejando un gran vacío, no solo en su familia y entorno, sino entre quienes le conocieron y convivieron con él.

De ahí este pequeño homenaje bautizando a esta casa de resineros, reconvertida en vivienda vacacional de dos plantas, con el nombre de Casa Chencho.